20 años
No me disgustaría que mañana
fuese 1 de julio. De 1993. No es que me importe que vaya a serlo de 2013, qué
va, porque hay mucho que celebrar, mucho. Pero el de 1993 estuvo bien. Ví a
Tomas Guasch diciendo paridas al fondo de la redacción de un periódico
deportivo de Barcelona en el que era el único en prácticas que no era catalán.
Vi a Juan José Castillo repartir faxes y teletipos y a Cristina Cubero
enredando y a montones de periodistas que a mis 20 años me parecían algo. Lo
eran. Al final de la noche, después de que España perdiera ante Alemania en
cuartos del Eurobasket, le dije al gran Paco Aguilar que muchas gracias por
todo pero que no iba a seguir y que me quedaría los días que me dijeran, pero
que el enorme cambio en las condiciones –a mi y a todos los becarios- ya
estando allá me parecía muy tremendo. Me contestó que tenía toda la razón, que
lo entendía y sentía. Me dio mucha pena, pero salí de allí y me fui a escuchar
a Bob Dylan. Fue la primera vez que lo vi en directo. Llegué muy poco antes de
que saliera, compré la entrada en la taquilla, entré y él salió. 20 años ya,
hay que joderse. Estamos los dos mucho mejor. Vamos, ni comparar, aunque ya no
llevemos ninguno el pendiente. Cada a uno nuestro nivel, por supuesto. Me
gustaron todas las canciones, enfrascado como estaba en algunas versiones
acústicas de canciones tradicionales de su país. Y las suyas propias. Hacía una
noche clásica de allá: caliente, húmeda y estrellada. Dio un concierto sin
puñetas, centrado y majestuoso, escupiendo algunas letras como alfileres y
otras como algodón, para acabar con el No soy yo, chica. Salí de allí y
supe que era para siempre. Que tengan el mejor verano que recuerden. O al menos
días o momentos que les emocione sentir dentro de 20 años. Seguro que sí. Salud.
3 Comments:
Bai ta zuri ere, y que te vaya bonito. Este verano ha de ser para cargar pilas, al menos solares. Que la primavera a ido como el parorama social, muy gris oscuro.
Salud
Salud camarada y cuida de los que tienes muy cerquita pues cada minuto cuenta y es irrepetible. Te leeremos a la vuelta.
Salud camarada y cuida de los que tienes cerquita pues cada minuto cuenta y es irrepetible. Te leeremos a la vuelta. Pura vida!!
Publicar un comentario
<< Home