Panolis

Visto que hay crisis y que ha bajado el precio del petróleo, la Mancomunidad ha optado por el transporte público. Una manera muy propia de optar por el transporte público es subir el precio del billete sencillo nada menos que un 10%, agárrate que hay curva. Las explicaciones a semejante actuación podrán ser las que ustedes se imaginen, pero aquí lo único cierto es que ir del Iruñaberri de Pío XII a la mitad de la Ciudadela cuesta 184 pesetas, siempre y cuando seas un panoli que no se quiere sacar una tarjeta de algún banco o entidad para ir de un lado a otro de tu ciudad, la ciudad en la que has nacido y que, en teoría, debería facilitarte el desplazamiento. No, mentira. Moverte por tu ciudad sin atufar con tu coche a los demás se paga, es bastante más caro que coger tu 4x4 y desplazarte de tu casa a la panadería. ¿Ustedes lo entienden? Yo no. Que un billete sencillo de villavesa cueste 1,10 debería estar penado por la ley, pero a día de hoy es una tarifa de lo más normal y de lo más lógica, visto que es la que la Mancomunidad va a plantear la semana que viene en su asamblea anual. Nunca he entendido por qué se penaliza a los que utilizamos el transporte público y no tenemos ninguna intención de hacernos socios de algún club para pagar ese vicio , el de no querer utilizar un coche para los desplazamientos cortos. Sé, no obstante, que es una batalla perdida, que poco a poco lo que se lleva es que los que no contaminamos paguemos por los que contaminan, que los que no estamos dispuestos a manchar las narices de los demás limpiemos el culo de los que van a usar el parking de la Runa. Está bien. No hay problema. Pero al menos sería más justo que con el billete nos explicaran que en realidad eso es así, que estamos haciendo el tonto, que somos el último eslabón.