París-Roubaix
Elena Torres avanza por el pasillo de adoquín como una rotavator. Los tacones que ha escogido son, a todas luces, mejores para layar que para andar. La cámara sigue al grupo y nuestra presidenta del Parlamento tira de brazos para impulsarse, toda vez que la tracción de sus extremidades inferiores es ínfima. Parece Txente García Acosta buscando las cunetas para evitar los boquetes del carrefour de l’Arbre dela París-Roubaix. La Le, mientras, ha cargado un tacón aún más alto, pero días y días de ensayos dan su fruto y pareciera como si flotara entre las trampas diseñadas por Mangado. La Le tiene un aire a Cancellara, en flaca, aunque habría que mirar bien si no tiene un motorcillo escondido en las costuras del vestido. A los lados, unos cuantos seres humanos –si no fallan las informaciones- asisten al paseíllo. No se ve a nadie lanzando cacahuetes. Segundos antes, nuestra presidenta del Parlamento ha metido codo como hay que meter a la entrada de los pavés de la París-Roubaix y ha dejado a la Ministra de Vivienda a su espalda. La Ministra le ha tomado el rebufo y contempla desde atrás, protegida del viento, su triste devenir. Corredor, acostumbrada a estas juladas de pueblo, no da importancia a que por obra y gracia de Torres sea la única de los siete miembros del grupo que está tapada. El espectáculo de ver a Torres delante suya tirando de riñones bien merece la pena. Cuando, finalmente, Torres y el resto llegan a la loseta que precede a la entrada de Baluarte, creo escuchar unas palabras salir de la boca de nuestra alegre y risueña presidenta: ¡libre por mí y por todos mis compañeros! Entran y los servicios de protocolo de la Casa Real retiran a los extras, los meten en trailers y los envían al próximo destino. Al día siguiente, Torres amanece con agujetas.
Elena Torres avanza por el pasillo de adoquín como una rotavator. Los tacones que ha escogido son, a todas luces, mejores para layar que para andar. La cámara sigue al grupo y nuestra presidenta del Parlamento tira de brazos para impulsarse, toda vez que la tracción de sus extremidades inferiores es ínfima. Parece Txente García Acosta buscando las cunetas para evitar los boquetes del carrefour de l’Arbre de
14 Comments:
Es que a mí los taconazos me ponen un huevo, por lo que nada malo puedo decir de una mujer que los calce, y menos siendo tan altos, pese a que la Torres es un poco madurita para mí. ¿Será de braga recatada o de tanga pentacampeón del mundo?
chapeau! cojonuda! que diría el suegro de la Le.
A la Torres, por su profesión de origen, le pega el de enfermera con minifalda, liga y escote profunciado, tipo las que presentó corporación dermoestética en su lanzamiento a Bolsa con todos los corredores (de Bolsa) babeando...El Colegio de enfermería elevó...su más enérgica protesta.
Cuando acabe la crisis propongo que se fiche un Asesor de imagen para que ayuden a eslegir trajes a la Yo y a la El.
Snif, snif, no llegaremos a tiempo para ser capital cultural de nada!
Pd, Cuando se tienen las rodillas gordas, mejor tapadas
A nosotros, en general, la Le no nos pone. Pero oiga, estilo tiene. Algunos le acusarán de machista. ¿Hubiera criticado los zapatos de un HOMBRE dirigente? Que nosotros no diremos nada, pero hostias por cosas así ya nos han caído.
si los zapatos le impiden andar y Sanz llega a ir con katiuskas, pues sí, pero para eso los hombres -en general- no son tan ridículos, por que no usan esos taconazos para parecer más altos. A las mujeres -en general- aún les quedan unas cuantas cosas que mandar a tomar por culo. Los tacones son una de ellas.
abrazos.
Quién es la Le? ¿Cubino?
machista. desde luego, criticar los tacones de las mujeres... pero si esos zapatos son comodísimos, además, no sé si sabrás pero a partir de 12 centímetros ayudan a fortalecer los músculos de la vagina y de esta forma se proporciona más placer. si es que no entiendes nada.
¿Acabará como la Eguren pidiendo el voto para otros?, Como son estos sociatas, ponen estampas con caja de resonancia por cabeza. A mi me ponen las que no tienen ética (Canal 6 Navarra, ayer mismo) pero de mala ostia.
Salud
Uy, la Eguren en mis tiempos de BUP sí que me ponía, sí. Qué piernas tenía por entonces.
Txandríos, cada día estás más crispado y críptico: estamapa con caja de resonancia... pues vale, ya dirás qué queires decir.
Lee bien anónimo. ¿Y de que está llena una caja para que resuene?.
Salud
Txandríos, joder, no es que hiles fino es que es nanohilo.
Voy a estar un mes opiao perdido, albricias. Oé, oé, oé.
VIVA MEXICO CABRONES!!!!
Y VIVA ZAPATA!!!
Salud.
Zapata no juega. Lo siento.
Joder qué golazo de Sudáfrica. Txandríos, es que ha sido mentar un apellido con raíz ZAPAT y joderse el invento. Los apellidos que empiezan así son gafes, coño.
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