12 enero 2006


Ibiricu

“Caballero, ¿me podría decir si voy bien por aquí hacia el Reyno de Navarra?”. “Sí, va bien, luego gire a la izquierda, siga recto y lo verá delante”. “Gracias”. Y llegamos. Iba con mi hermano, que no veíamos juntos un partido de Osasuna desde que Esparza le metió un gol al Barça en Copa. Al principio dudamos, por la falta de costumbre, pero al final entramos. Una preciosidad oyes, verde por aquí, rojo por allá, to en su sitio, buen ambiente, asientos libres, ni mucha ni poca gente. Perfecto, lástima que no fuera miércoles (ya saben, el partido soñado, miércoles a la noche, lloviendo a mares, bocata, 0-2 al descanso y 3-2 al final). “Más veces deberíamos venir William, mira que somos vagos”. “Pues sí, la verdad es que está alao”. Pedimos unos cafés para ir quitando el frío y hacer tiempo, mientras por la megafonía decían no sé qué de las peñas. “Oye, ¿ése que ha pasao no era Ibiricu? ¿No te dijo que estaba de director en un hotel en Sevilla?”. “Era, era. Sí, estaba. Pues tendrá puente o se habrá vuelto a currar aquí”. “¿Y qué órdigas hace un director de hotel de Sevilla vestido de botones en Pamplona?” “Yo qué coño sé Jorge, pues volver a sus orígenes. Calla, que empieza”. Celebramos el gol de Delporte, insultamos al árbitro cuando se tragó los penaltis, nos metimos con Severiano Ballesteros, Bustamante y Botín (la triple B), juramos con el gol del Racing, yo me comí sus uñas, él las mías. Vamos, lo típico de dos hermanos compenetrados viendo el fútbol. Y se acabó el partido. Y apagaron la tele. Y entonces mi hermano me dijo: “Jorge, majo, la próxima vez, mejor pregunta por El Sadar, que en este hotel se está muy bien, pero por 40 euros que nos ha costao la entrada qué menos que oler a Reflex”. “Coño, haber preguntao tú, tío listo. Y Ibiricu te mintió”.

5 Comments:

Anonymous Anónimo said...

Pues en medio de todo tuvisteis suerte. Mira que si os encontrais con alguien que os meta en una máquina del tiempo y os envia al Reyno de Navarra de tiempos de Sancho III pongo por caso! Al fin y al cabo de un Hotel se puede salir sin más percance, pero lo de la máquina es más chungo. Al loro!

4:26 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

El ¿partido soñado?... Osasuna habría perdido 3-2 contra el Arsenal...

5:51 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

¿has leido Fever Pitch o qué?

6:05 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

Amén.

8:33 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

A mi me parece arriesgado el denominar, oficialmente, REINO DE NAVARRA a un estadio de fútbol. Es que yo tengo mucho respeto a algunas cosas. Entre ellas, a NAVARRA y a su HISTORIA.

Desgraciadamente, en el primer partido con la nueva denominación, le alcanzan con una lata a un linier y le sacan la tarjeta roja a nuestro inefable entrenador. Me lo temía. Ya veremos cómo queda nuestra dignidad el día en que nos visite el ZARAGOZA.

10:39 p. m.  

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