15 octubre 2006


TDT

La vicepresidenta del gobierno de la cosa, María Teresa Fernández de la Vega, ha pedido a los ciudadanos madrileños “disculpas” por la confusión creada en torno a la candidatura socialista a la alcaldía de Madrid. A los demás, que nos zurzan. A los demás, que llevamos tragándonos la brasa esta de la alcaldía de Madrid como si fuera la de nuestro propio pueblo, que nos operen. Estamos ya habituados a que, cosa que pase en Madrid –y no por que sea Madrid, sino por ser la capital de la cosa, que lo mismo pasaría si fuera Barcelona, Sevilla o Zafra-, cosa que parece que nos ha pasado a todos sin excepción, dada la atención informativa exagerada que se le dispensa. Da igual que sea un atasco, una torcedura del huevo derecho del delantero local o un tránsfuga. Pero esta vez ha sido excesivo. De ahí que pido encarecidamente que los telediarios nacionales lleven incluida la opción de noticias alternativas si uno no quiere ver las andanzas del Bono de turno haciéndose querer en Chueca y luego diciendo que no, tontorrón. ¿Eso era la televisión digital, si no entendí mal, no? Que no te apetece, pretas botón y una presentadora paralela –en el tiempo- te habla de otro tema. Que sigue sin gustarte, vas a una tercera opción. Y sucesivamente. No me vale eso de que si no te gusta apagas, no. Bastaría con que todas las noticias encajaran unas con otras y así si te pasas a otra no te pierdes nada. También es verdad que, si apagas, la mayoría de las veces no te pierdes nada, pero bueno, ése es otro tema. Porque luego algunos se quejan de que los americanos no saben poner España en el mapa, cuando sospecho que el 90% de los periodistas de Madrid creen que una trainera es una trainer personal. Lo que todavía no entiendo es porque no han pedido aún la independencia.