10 marzo 2007

Bragas
Estoy orgulloso. Por fin un español está en la lista de las 10 personas más ricas del mundo. Yo este año no estoy porque el día que me llamaron para preguntar por mis bienes estaba haciendo la declaración de la renta y mis declaraciones son finas, nunca mejor dicho. Por cierto, ¿cómo será la declaración de la renta de Amancio Ortega? ¿contrata a los de la mudanza para llevar los papeles al banco? A mi es que en cuanto veo un papel de más me entra un estrés tremendo, que me tiene que dar el asesor una pastilla de las suyas. Pobre Ortega, ni pensarlo quiero. Total, que el hombre este se harta de vendar bragas o lo que venda en sus tiendas y ya acumula la nada despreciable cifra de, cuidado que viene curva, tres millones de millones de las antiguas pesetas, más o menos cinco años del Presupuesto General de Navarra, incluidos los gastos de las exposiciones sobre el futuro de Navarra, la Navarra en marcha, la Navarra de antes, la de los lados y la vista desde abajo. Tiene que tener la casa los domingos llena de nietos esperando la paga, aunque tal y lo que cuentan de los salarios que paga en sus tiendas casi mejor que vayan los nietos a pedirle la paga a su abuela, que resulta que es la ex mujer de Amancio y que viene a tener algo así como 430.000 millones de pesetas, y que igual no es tanto de la cofradía del puño. Da igual, esos nietos tienen que ponerse de palmeras de chocolate hasta la bola. Bueno, el asunto es que está podrido de pasta, aunque Bill Gates aún tiene el doble que él, porque Amancio no se ha dado cuenta que el negocio es vender una braga xp 98 y luego una 99 y luego sacar un modelo de braga que se quita y se pone más rápido que las anteriores o vender las bragas dentro de cds y poder descargártelas por ordenador. Amancio, pa lo que quieras.