Hey

Ya me parecía a mi –y a mi abuela- que Julio Iglesias tenía que estar o aquí o como muy lejos en el Camping de Ezkaba haciendo fuegos. Así que que se anuncie que cantará en Baluarte en octubre no nos pilla por sorpresa, porque somos así de listosquetecagas. Es que Julio siempre está donde están sus hijos. O al revés. Y si cogen ustedes la publicidad que está haciendo la empresa ésa que va a abrir un centro de interpretación de la agricultura y la ganadería en donde por cerca el ayuntamiento está invadiendo huertas verán que son los hijos de Julio Iglesias, con sus pelos a tazón y sus camisas y sus polos y ellas con sus angelicales vestidos vaporosos agggg. Abuela: Yo estos niños los he visto como unas 700 veces en la portada del Hola, con Miranda. Yo: ¿Cogiendo un puerro? Abu: Dan un poco... no sé, pobres criaturas. Yo: Hombre, abu, no van a coger para esa publi a unos niños pelanas con rastas y mallas fucsias como los de Aranzadi Bizirik. No es su público objetivo. Los hijos de esos ya distinguen una vaca de una caja de leche. Abu: Todo debería tener un límite. Abrir un centro pa eso aquí, aquí... Es que es por demás. Yo: ¡Mira! ¡Cientos de jóvenes haciendo cola para la inauguración de una tienda de ropa! Abu: ¡ayyy, no sigas, que me mareo! Yo: Y Barcina cortando (o recortando) la cinta con una tijera gigante. Abu: no seas cruel conmigo... Yo: Y todos con pañuelico rojo, en septiembre. Abu: pásame el vino.  Yo: ¡Me gustaaaaan las mujereeeees me gusta el vinooooo! Abu: ¡Hey! Yo: Estará bien el concierto. Abu: Ya me figuro. Yo: La entrada más barata 100 euros. Abu:  Normal, si hay museos pa interpretar un puerro... Yo: ¿Comemos la lechuga? Abu: ¿de dónde es? Yo: No sé, la he comprao en La Morea. Abu: ¡fuera de mi casa! ¡Los dos! ¡La lechuga y tú! ¡Y los niños esos!