Implementando

Me encanta la consejera Alba, desde un punto de vista meramente metafísico, ojo. Es de esa clase de políticos o personas públicas que a lo largo de su larga o corta actividad profesional han asistido a tantos cursos de renovación, mejora, gestión de equipos y personas y cosas de estas a mi escaso juicio un tanto extrañas y sacadas de madre -lo que no sé es de qué madre- que, subconscientemente, han perdido el contacto con el lenguaje habitual y usan unos palabros raros, que son esos que dicen lo mismo que otros que se usaban más antes pero que les parece que no quedan tan bien. Así, la otra tarde, aparte de que vi llover, le escuché decir que iban a "implementar" no sé qué cosa. Estaba yo con mi abuela en un cursillo acelerado de cómo conseguir que la bechamel para las croquetas no quede muy harinosa y sí delgada a la par que firme y nos quedamos los dos a bolos, como los que se me iban haciendo en la masa. Implementa un poco más de leche, que si no vas a hacer un chirgo , me dijo mi abuela en pleno brainstorming . Al poco, salió el consejero Miranda y anunció el nuncio que está estudiando "deflactar" el IRPF. Deflacté un poco el fuego para que no se me quemara la harina y me rasqué un huevo, aunque tal vez lo apropiado sería decir que desactivé una desazón. Las croquetas quedaron de concurso y se me inflaccionó el orgullo, hasta que mi abuela, que es de la escuela pragmática aparte de ser de Ibero, me resituó: michico, este coaching ha sido satisfactorio, pero tienes que visualizar que en el entorno de tu espacio gastronómico no vas a recibir mi feedback, así que deberás focalizar la receta adecuadamente, segmentarla y aprovechar las sinergias, ya sean de jamón o de pollo . Nos pusimos las dentaduras y la llevé al médico, al galeno, que dice ella.