01 mayo 2013

Registrados


Entiendo a la consejera de Economía cuando ayer, saltándose las tradiciones, el protocolo, los plazos, las precauciones y el pacto que tienen de siempre gobierno central y gobiernos autonómicos de no anunciar cifras de paro registrado hasta que el mes no acaba, avisó de que el paro registrado –aquel que lleva nombre y apellidos y que obliga al inscrito, no como la EPA, que es una encuesta sin ninguna obligación por parte del entrevistado- “descenderá en abril en unas 1.300 personas, a falta del cierre”. La entiendo. También entiendo que se hayan pegado años hablando casi solo de la EPA –la que rige en Europa y España porque ambos decidieron que siempre daba cifras más bajas- y ahora que la última EPA en Navarra ofrece más de 58.000 parados y el registrado marca 56.524 y según ella marcará unos 55.200 hoy, mañana o pasado, lo haga. Para eso están las cifras: para hacer con ellas lo que da la gana. Pero insisto en lo de siempre: el tamaño de la EPA en Navarra es tan pequeño que permite fluctuaciones irreales. Ocurre otro fenómeno: así como antes sucedía de Madrid para abajo, ya mucha gente en Navarra y de Madrid para arriba no se apunta al paro registrado o pasa de sellarlo al terminársele la prestación. ¿Motivo? Su inutilidad. De Madrid para abajo la EPA daba más paro que el paro registrado. De Madrid para arriba, era al revés: el paro registrado era mayor. La gente confiaba en las oficinas de empleo. Ya no es así. Basta ver que cada vez menos gente declara ser activa en la EPA –o trabajando o buscando empleo-. No solo acaban con el trabajo, también con la ilusión. Pero estamos tranquilos, porque el PSN tiene un plan: Construyendo Navarra. Tardará unos meses, pero es lo de menos. Lo único de bueno de esto es que los nombres de estos gandules también están registrados.