30 junio 2013

20 años

No me disgustaría que mañana fuese 1 de julio. De 1993. No es que me importe que vaya a serlo de 2013, qué va, porque hay mucho que celebrar, mucho. Pero el de 1993 estuvo bien. Ví a Tomas Guasch diciendo paridas al fondo de la redacción de un periódico deportivo de Barcelona en el que era el único en prácticas que no era catalán. Vi a Juan José Castillo repartir faxes y teletipos y a Cristina Cubero enredando y a montones de periodistas que a mis 20 años me parecían algo. Lo eran. Al final de la noche, después de que España perdiera ante Alemania en cuartos del Eurobasket, le dije al gran Paco Aguilar que muchas gracias por todo pero que no iba a seguir y que me quedaría los días que me dijeran, pero que el enorme cambio en las condiciones –a mi y a todos los becarios- ya estando allá me parecía muy tremendo. Me contestó que tenía toda la razón, que lo entendía y sentía. Me dio mucha pena, pero salí de allí y me fui a escuchar a Bob Dylan. Fue la primera vez que lo vi en directo. Llegué muy poco antes de que saliera, compré la entrada en la taquilla, entré y él salió. 20 años ya, hay que joderse. Estamos los dos mucho mejor. Vamos, ni comparar, aunque ya no llevemos ninguno el pendiente. Cada a uno nuestro nivel, por supuesto. Me gustaron todas las canciones, enfrascado como estaba en algunas versiones acústicas de canciones tradicionales de su país. Y las suyas propias. Hacía una noche clásica de allá: caliente, húmeda y estrellada. Dio un concierto sin puñetas, centrado y majestuoso, escupiendo algunas letras como alfileres y otras como algodón, para acabar con el No soy yo, chica. Salí de allí y supe que era para siempre. Que tengan el mejor verano que recuerden. O al menos días o momentos que les emocione sentir dentro de 20 años. Seguro que sí. Salud.


29 junio 2013

'Safety Car'

¡Ya ha salido el safety car! Para el PSN, digo, que en las encuestas que se manejan tanto dentro de los partidos como en los medios pierde escaños en todas y en alguna hasta 3 para quedarse en 6. Pero ya les ha salido el safety car, que iban ya con las ruedas hechas viruta, de aguantar todo este año poniendo a caldo a UPN, a su presidenta, a todo lo que hacían y decían, pero sin a la hora de la verdad usar las herramientas –que las tienen- para que los ciudadanos volvamos a decir si esto que ha sucedido en los dos últimos años –que ha sido muchísimo, tanto a nivel económico como social y político- estaba conforme a lo que nos habían dicho hace dos años. Pero, como es su costumbre, no lo han hecho y el inicio del Tour, de la primera salida de vacaciones, San Fermín y la posterior catarata de fiestas de los trece mil pueblos de este pueblo les van a dar el respiro necesario para al menos no tener que ser ellos los que tomen decisiones: quizá sea la Justicia –o no- la que precipite lo que no solo demandan, ni mucho menos, los votantes de los partidos nacionalistas vascos. Lo demanda mucha más gente, por mucho que al poder oficial siempre le interese dividir todo en dos bloques claros y punto. No, no, no. Pero con la deriva de la cúpula del PSN –hace tanto ya de eso- viaja también no ya la deriva de Navarra, a la que no se le pregunta qué quiere tras tantos lamentables sucesos, sino la de la propia sociedad, atónita y a la fuerza cada día más cansada y desencantada con los políticos. El inmovilismo del PSN, su miedo a dar pasos hacia un lado u otro, o simplemente a quitarse de en medio cuando no juega un papel, es un lastre que a cada día que pasa nos cuesta algo. Pero a la segunda escudería de UPN le da igual, mientras de vez en cuando les pasen piezas nuevas.


28 junio 2013

Anécdotas

Tenía por casa unos vídeos que en su día regalaba la Caja de Ahorros Inmaculada de Aragón –CAI- en los cuales Pedro Delgado narraba con su cadenciosa voz su carrera deportiva. Uno de los vídeos estaba centrado solo en la Vuelta y otro en el Tour. Cada uno duraría una hora o así. No los encuentro, pero sí que recuerdo que cuando los grabó –no había Internet-, no le hacía falta abuela, la verdad, como tampoco en su biografía, A golpe de pedal (el martes echaron la etapa de Alpe D’Huez del 88 y rememoraba él y parecía que le había dejado ganar a Rooks, semejante etapón). Si no ganó 4 Tours fue por pura mala suerte (tuvo que ganar el del 83, ese sí). Vaya por delante que yo era del Reynolds y que si en una fuga van un Movistar y otro –el que sea-, quiero que gane el Movistar. Y que adoraba a Perico. Las enfermedades no se eligen. La cosa es que rescato de Youtube ese vídeo de CAI y lo que comenta acerca de su positivo por Probenecid de 1988, un enmascarante que él dijo después que usaron para drenar los riñones. No estaba en la lista de prohibidos por la UCI, sí por el COI, y por tanto tenía derecho a estar en carrera. La UCI prohibió el Probenecid al mes. En ese vídeo, Delgado –le dedica un minuto al asunto, uno- dice que todo quedó en una anécdota y que fue un fallo de un comité técnico. Nada más. Ésa y no otra ha sido su actitud ante el dopaje durante todos estos años desde que hace ya casi 20 comente Tour y Vuelta: mentarlo lo menos posible y jamás cargando contra el tramposo, sino más bien vamos a centrarnos en la carrera y es una vergüenza lo de los organismos deportivos. Sin defender nada, pero sin ser firme y contundente y claro. Al final ha encontrado patrocinador para comentar el Tour. Y eso está bien. Es otra oportunidad para ser más trasparente.


27 junio 2013

Tú eliges

Llegó a tal extremo la cosa, a tal, que una idea cuando menos en su filosofía inicial aceptable se convirtió –por la propia naturaleza del ser humano, de algunos, cuando le dejan- en un despiporre o eso que mi madre llama zurriburri: ¡vaya zurriburri se ha montao! A lo que mi abuela suele replicar: ¡Toma no! El extremo, por poner un ejemplo cercano, era que unos cuantos se asociaban, presentaban un proyecto por peregrino que fuera –¡qué ideas más peregrinas tienes!-, se lo aprobaban y con eso financiaban, que yo lo vi, unos columpios para sus hijos en el pueblo. Un columpio o cunumpio, en concreto. Y así con todo. Eso acabó siendo Tú eliges, tú decides, un zurrakapote en el que todo cabía y en el que cada grupo de amigos, empresa, asociación, club, institución, fuera de donde fuera y se dedicara a lo que se dedicara, movilizaba a los suyos y a quien no hubiera elegido para que el 33% del dinero que obtenía Can con el beneficio que generaba cada uno de sus clientes fuera a ese proyecto. ¿Legal y hasta ético? Innegable. ¿Solidario y social? Indudablemente, no, no se le podía ni puede llamar Obra Social de una Caja de Ahorros, tal y como tampoco se le podía llamar así a lo que funciona aún y que viene a ser algo similar: dar un euro por cada firma, se sea cliente o no. Eso es una subasta y una campaña de marketing, no Obra Social, tal y como afortunadamente y bien alto y mucho más claro que yo manifestaron el martes numerosos colectivos que atienden a los que peor lo pasan –ya saben: comer, dormir caliente, tener medicinas y esperanza. Todo lo demás está muy bien, pero es todo lo demás-. Si quien finalmente gestione esos recursos no atiende esa petición que es un grito, habrá un motivo más, y quizá el más fuerte, para no confiar jamás en la solidaridad y ética de algunos.


26 junio 2013

Su sombra

Aquí andamos, en Punxsutawney, aunque, qué se le va a hacer, sin Andie MacDowell. Y por partida doble estamos en el poblao donde cada año por febrero sale a la luz la marmota Phil y que es clave en la película Atrapado en el Tiempo, en la que el protagonista vive cada día el mismo día y buenos días, excursionistas. Cada día político es prácticamente idéntico al otro y este a su vez al anterior y así puedes ir tirando hacia atrás una semana y de la semana al mes y del mes hasta cuando Barcina se deshizo de Jiménez y sus gentes –salvo de López Dios, de Consumo, que aspira a consumir todo el mandato, así mande la CNT. Este es capaz de seguir en el cargo aunque gobierne Consumidores Irache. Llegaría a un acuerdo-. No se mueve un papel, no hay un clavo –para algunas cosas, claro- y la parálisis institucional es tan evidente que recuerda a esa fase que tiene Bill Murray en la película en la que ni levantarse de la cama hace. La otra partida se refiere a que también esperamos a que la marmota Phil, encarnada en el Tribunal Supremo, salga de su madriguera y anuncie cómo va a ir el invierno, porque esto de momento sigue siendo invierno. Porque dijo Barcina que cuando el Supremo se pronuncie acerca de su posible imputación, ella anunciará qué va a hacer o dejar de hacer, mientras aquí andamos el resto, en Punxsutawney, asistiendo el trajín de barriles y vidrios llenos que vaciaremos en San Fermín y a tres o cuatro cositas más que plantea este gobierno medio inerte y que, como los recortes en las empresas públicas, lo mismo al día siguiente se encarga de remendar la oposición. Un auténtico sindios y la marmota marmoteando en una hibernación que ya dura casi un año o sin casi. Como salga y vea su sombra y se meta de nuevo dentro exigiremos que al menos venga Andie MacDowell.


23 junio 2013

Desigualdad

A Lasse Viren le llamaban El Vampiro. Era alto, flaco, blancucho. Ganó los 5.000 y los 10.000 en Munich’72, no hizo nada especial entre esos dos oros olímpicos y la siguiente cita cuatro años más tarde. En Montreal’76, Viren se impuso en los 5.000 y los 10.000. 18 horas más tarde de ganar los 5.000, corrió el maratón. Fue su primer maratón. Aspiraba a clonar la hazaña que 24 años antes había logrado el checo Emil Zatopek. Hizo un marcón de 2.13, pero solo pudo ser quinto. A raíz de su intento –y también al comprobar que en 4 años apenas había destacado y de repente estaba en una forma demencial en el momento exacto- se comenzó a sospechar de que no solo iba a Kenia a entrenar con los atletas locales a gran altitud: se sospechó de que allí ganaba glóbulos rojos, que transportan más oxígeno, y que se sacaba sangre, la guardaba y se la autotransfundía en los momentos previos a las pruebas clave. Aquella práctica –supuesta- no estaba prohibida en la época, pero se considera dopaje desde 1985. Y le valió su famoso mote. Ayer, el ciclista alemán Jan Ulrrich reconoció al fin que las bolsas halladas durante la Operación Puerto a todo el entramado de Eufemiano Fuentes eran suyas y que recurrió a ese dopaje –y a más- aunque “no tomé nada que no tomaran otros”. Es la misma, clásica, manida y repetida frase de decenas y decenas: solo quería igualdad de oportunidades. Eso es mentira, ya que así solo se potencia la desigualdad. Los atletas keniatas con los que entrenaba Viren no tenían el dinero necesario para el material que exige una autotransfusión. El dopaje solo ataca a la universalidad e igualdad del deporte. Salvo en España, donde para lograr la igualdad y la impunidad ya hay juezas que ni dejan que se hagan públicos los nombres de las bolsas halladas junto a las de Ullrich. 

22 junio 2013

¿Qué?

Una de mis mejores amigas de la cuadrilla perdió a sus padres cuando tenía 3 años. Su hermano pequeño tenía 1. Un accidente de coche. Otra, también de la cuadrilla, se quedó sin padre a los 15. Su padre iba en bici y un camión acabó con él. Unos años más tarde, a mi amiga le tocó el timbre un foral para informarle de que su chico de tantos años, al que acababa de decir en un rato nos vemos, se había matado con la moto contra un quitamiedos. Ese policía foral era el cuñado de mi amiga. Y de mi amigo, el del quitamiedos. Hace 16 años, Patán y Pepa, que eran novios, se estrellaron en la ronda. Pepa falleció al instante y Patán aguantó un mes como un coloso. Mikel, el otro Mikel... así podríamos seguir un mal rato, supongo que todos nosotros, en mayor o menor medida, más de cerca, menos, más directo, un poco más lateralmente o de un modo devastador. Por supuesto que los coches, las motos, el transporte, son necesarios, útiles, divertidos, vitales en ocasiones. Yo mismo a veces echo de menos tener el carné para largarme un momento a alguna parte o llevar a alguien o ver algo y volverme. Mucho. Pero no cabe ninguna duda de que, salvo asesinas excepciones, es prácticamente la única actividad humana en la que sin tener absolutamente ninguna responsabilidad se te pueden llevar por delante y ni te enteras. Ni siquiera es una enfermedad, algo en lo que en muchos casos tampoco tienes ninguna culpa, pero que en cualquier caso forma parte de ti. Esto viene de fuera y te quita de en medio, así seas el ser humano más precavido del universo. Es brutal. Seguirá habiendo siempre accidentes, claro, y tragedias inenarrables, pero cuando leo las trabas a todo lo que es transporte público, cuando veo a auténticos asesinos al volante, no puedo. ¿Qué les dices a dos personas de 5 y 9 años? 

21 junio 2013

Oro eterno

Que me han metido la droga en la maleta. Algo así argumentaba el miércoles Barcina en el Parlamento, porque –dijo- el sistema de retribuciones de Can “estaba implantado décadas antes”. A ver: que os han encontrado en la maleta la Comisión Permanente, que es una droga de estas nuevas de diseño, que no son unos tristes cogollos de maría. Droga nueva, nada de décadas. Y si tres y quizá cuatro van a acabar en los juzgados, es por esa droga nueva, no por la antigua. Pero, afortunadamente –para ella, para tantos- tenemos a Bildu: la antigua HB y sus afluentes –y, por supuesto, su muchísimo camino por recorrer, faltaría-. Bildu y su genealogía han hecho más por UPN que montones de buenos políticos, afiliados, funcionarios, técnicos, campañas, prensa y hasta el propio programa político. Esto es tan innegable como negable es que todo el asunto de Can haya sido, como soltaba Barcina sin pizca de sonrojo, “un ataque a la identidad propia de Navarra”. Qué mierda tendrá que ver la identidad propia de Navarra con esto. Nada, cero. Pero le sigue valiendo, es el filón de oro que ya quisieran para sí el resto de dirigentes en otras muchas comunidades. El clásico cromo que si te cae no lo cambias por todo el álbum. Basta ver que ante las argumentaciones de Bakartxo Ruiz (Bildu) a los hechos probados, García Adanero dijo que “Bildu no tiene legitimidad para cuestionar” si Navarra puede tener una presidenta que acabe en los tribunales, cuando uno de sus candidatos al Ejecutivo “tuvo que venir esposado” al Parlamento. Hablaba de Guillermo Arbeloa, efectiva y condenablemente miembro de ETA entonces. Eso fue en 1987. En el lodazal que es esta comunidad, algunos siguen metiendo el hocico y encuentran estas antiquísimas pepitas de oro. ¿Campaña orquestada? UPN la tiene asegurada al menos para 100 años.


20 junio 2013

Pendular

El posible comprador habla con el vendedor, que le destaca que “¡y mire qué valle, todo exterior, todo luz!” Al otro la casa le gusta, pero tiene la duda de si ... “¿no la encuentra usted un poco apartada?” El vendedor se defiende: ¿apar-ta-da? E insiste: ¿apartada de dónde? Y lo explica, girando sobre sí mismo mientras señala direcciones a los gritos: si esto en 10 minutos se planta usted allí. ¡O allí! ¡O allí! El otro duda, pero se le ilumina la cara cuando el vendedor le dice que por allá pasa el tren: el Expreso Pendular del Norte. ¿Y cada cuanto pasa? El vendedor, que huele su triunfo, no obstante titubea: pues... la verdad es que no tengo el horario aquí delante. Pero, más o menos, ... cada 25 años. P. Tinto acaba comprando la casa, se instala allá con su esposa –que es ciega-, luego caen del cielo unos marcianos, llega un tío con una bombona de butano y lo adoptan y aparece también por allá Usillos, el de si hay que sanear se sanea. El Expreso Pendular del Norte y si hay que sanear se sanea. Saneando saneando las cuentas, convirtiendo en papel de fumar el famoso convenio aquel entre Pepiño Blanco y el últimamente siempre sorprendido –según su mediático abogado- Miguel Sanz, demostrando bien claro que al gobierno de Navarra se la cuelan a las primeras de cambio –si a eso añadimos que según ellos el convenio económico es casi una ruina para nosotros, lo que no entiendo es que no sean independistas. ¡Ah, que ya lo son! De lo suyo-, la vía internacional del Expreso Pendular Navarro va a caber en una baldosa, aquella que empezó a sanear Usillos y cavando cavando se plantó en el propio centro de la tierra, donde están nuestros bolsillos a disposición de estos inútiles o mentirosos o irresponsables o todo ello junto y desde hace más de 25 años.


19 junio 2013

Esperanza

El sábado 12 de abril de 1980, Terry Fox corrió un maratón (42 kilómetros y 195 metros). Los maratones se suelen celebrar en domingo, pero este fue en sábado. El domingo 13, corrió otro. Y el lunes 14. También el martes 15. Y el 16 y el 17 y el 18... Fox corrió durante 143 días un maratón, aunque tuvo que descansar alguno por pequeñas molestias, incluida una tendinitis. Todo esto lo hizo en Canadá. Salió de Terranova, junto al Océano Atlántico, y fue cruzando su país de derecha a izquierda, hasta que el 1 de septiembre, en Thunder Bay, en el Lago Superior, 5.373 kilómetros después, Fox se detuvo. Ya no corrió más, pese a que su objetivo era llegar al otro extremo, al Pacífico, unos 6.000 kilómetros más. Terry Fox tenía la pierna derecha amputada un poco por encima de la rodilla. Y 32 años. El 2 de septiembre, al día siguiente de detenerse, anunció que padecía cáncer de pulmón, un cáncer que había sido el causante de su amputación y el causante de que el sábado 12 de abril de 1980, en San Juan, Terranova, mojase su prótesis en el Océano Atlántico e iniciase su legendario camino para recaudar fondos para la investigación del cáncer. Denominó a su periplo El Maratón de la Esperanza. Fox murió 10 meses después de dar sus últimas zancadas en Thunder Bay y a día de hoy su carrera, la Carrera Terry Fox, se celebra en 60 países y lleva recaudados más de 335 millones de euros a favor de la investigación. No todos podemos ser Terry Fox, ni sumar solos tantas zancadas, pero, dando una cada uno de vez en cuando, se puede ayudar a las personas que la sufren y a su entorno a cruzar la enfermedad con más esperanza. Este próximo domingo hay carreras populares en Burlada y Noáin para colaborar con los afectados por la leucemia y la esclerosis múltiple. Correr es de valientes.


16 junio 2013

'Pelocohete'

Cuando hace unos meses le conté a un amigo periodista que a mi rival le había dado por quedarse embarazada así de sopetón –ambas cosas: contárselo al amigo y el embarazo-, al margen de alegrarse mucho como se alegró todo el mundo me mandó un par de textos preciosos de Manuel Jabois y David Gistau, que son periodistas –leo poquísimo, no es broma-, y que habían tenido también un hijo o hija y escribían sobre ello. Yo leí aquello, me pareció precioso es poco y no le conté a mi amigo el verdadero motivo por el que siempre he querido tener un niño –o niña, porque al principio le llamábamos Miss Sunshine. Hasta la imaginábamos nacer ya con las gafas puestas y el tutú. A saber-. El verdadero motivo es que siempre quise tenerlo para vengarme: el asesino de la silleta. Sentir ese poder: los caminantes apartándose a tu paso... Temiendo por sus tobillos, por sus espinillas, esas silletas que parecen furgonetas, ese metro de seguridad que te deja todo el mundo a cada lado. El caso es que Luka nació, admiré a su madre una vez más hasta el infinito, pero nada de eso ha pasado. Debe ser cosa de la silleta, que tiene más años que yo. O que el ojos de ballena y el mendas salimos tan de amanecida que a lo sumo nos estamos cruzando únicamente con la mitad de las fuerzas del orden existentes, que miran a ese tipo con pantalones de trek empujando un carro a las seis de la mañana y mi abrigo encima a modo de sombrilla –duerme raro-y que de vez en cuando mete la cabeza por entre el cortavientos para ver si el artefacto respira. Cualquier día nos piden los papeles y me lo despiertan. En fin, que nada de lo que uno planea sale como quiere. Sale mejor, tanto que no lo puedo explicar y por tanto ni lo intento. Feliz cumple dos meses, pelocohete. Siempre vas a ser increíble. ¡Mira, un tobillo!



15 junio 2013

Así es

Son las ocho de la tarde de ayer y voy a hacer lo que ya tenía pensado hacer pero no ayer para que ustedes lo lean hoy sino más adelante, el último o penúltimo día de la temporada, a la que le quedan unas dos semanas. Y lo voy a hacer ahora porque creo que así me obligo más en las dos semanas que restan. Y no lo voy a hacer ni por falsa modestia ni por nada parecido, sino porque creo que se lo debo y me lo debo. Y porque alguna vez tiene que ser la primera tras más de 1.700 y pico días por aquí: les pido perdón. ¿Y eso? Muy simple: creo –sinceramente, muy sinceramente- que este año no he estado a la altura, esté donde esté esa altura o bajura, que me da igual. Es una sensación interna que arrastro hace meses y que se ha agudizado en las últimas semanas y que ni siquiera tiene que ver con el cansancio de la repetición. Tiene que ver con que si yo no disfruto del todo haciendo esto porque me cuesta y, aunque muchos de ustedes ni lo noten, algunos seguro que sí y sobre todo yo, que les largo esto casi como terapia y porque ayer, como muchas otras tardes, no sabía de qué escribir. Podría usar como excusa que el panorama navarro es muy igual hace meses, que todo va en las mismas direcciones, que no se mueve una hoja, que escribo además otros días en otras partes. Filfa, excusas y mentira. No he estado a la altura. Y lo siento de verdad, por mi mismo y por los que lo hayan notado. Se lo digo hoy porque largarlo el último día queda como si no le diera importancia. Y se la doy, mucha. En un año en el que los compañeros y compañeras de este periódico han superado tragedias humanas muy duras que siempre les pesarán, un ERE, bajas muy largas y pese a ello han estado a tope, yo no siento lo mismo, pese a intentarlo. Disculpen que se lo diga y la sinceridad. Mañana más. Y mejor.



14 junio 2013

¿Hay o no?

¿Comienzan a notar en sus sistemas nerviosos los efectos sedantes de las diferentes noticias que ya desde hace unos días o incluso semanas hacen referencia a los Sanfermines? Yo, sí. Cuando era crío y acababa el cole, me largaba a San Sebastián a casa de mi primo, solo por no soportar los días previos. Ese nerviosismo que la gente es que no se aguanta, ese olor como a fritanga que ayudado por el calor va saliendo de todas partes, esas rubiazas llenas de ombligos... Insoportable. Volvía el 5 a la tarde, me metía en la cama,  no dormía nada y a saco. Son increíbles, la verdad. Pero los días anteriores deberían estar prohibidos –de la misma manera que habría que fusilar a quien cante el Vals de Astráin fuera de fechas. Ahí, en el muro que antes había a la derecha del Toki y el Sua-: la tómbola, el vallado, los toreros, las ganaderías, que si el Riau-Riau sí, que si no, que quién tira el cohete, la brasa de la escalera, los que van a venir a no sé qué, los feriantes, blá, blá. ¿A quién coño le importa eso? A nadie. ¿Y por qué? Porque a la gente –lógico- lo que de verdad, pero de verdad de verdad, le gusta de Sanfermines es esto: pimplar sin desmayo. No tienen más secreto. Podemos –y los estudiosos y castas y los que hacen carrera con esto lo hacen y les alabo- vestir el santo como queramos y seguro que sí que hay cosas bonitas y emocionantes y blá, pero al pimple, la clave única y exclusiva es el pimple. ¿Hacemos una prueba? Prohibamos el pimple un año. No se vende alcohol en Navarra del 1 de julio al 15. Con un par. Y a ver quién se queda y se chupa todos los actos a aguas e isostares y a ver qué puta gracia va teniendo la cosa. ¿No dice la gente que lo lleva dentro, que es casi su adn, que no piensa en otra cosa y todos esos autoengaños? ¡Mentirosos! 

13 junio 2013

De órdago

¿Recuerdan aquel sketch de Els Joglars en TVE en el que un fugitivo iba y venía por una laberíntica acequia abierta en un bosque, justo situada entre las mugas de Navarra, Guipúzcoa y Francia? La acequia estaba –obviamente- hundida sobre el terreno a modo de pasillo de trinchera y el tipo la recorría ante la impotencia de un hertzaina, un foral, un guardia civil, un nacional y un gendarme. De vez en cuando, para tocar los cojones, pisaba tierra de alguien y el número se hacía la ilusión de que pillaba cacho, pero el otro volvía entre risas a lo que cuando se juega a polis y cacos gritamos ¡casa! Cuando pasé el domingo a las 7 por el Soto de Burlada y un par de alcantarillas a 50 metros del río aunque el río seguía en su sitio echaban agua a borbotones pero me fijé que estaba todo acordonado –caía la de San Quintín- y no había ni un coche y horas después me enteré de que en Pamplona su policía no había hecho lo que había hecho la de Burlada, me acordé del sketch y aluciné. A las 7 de la mañana, el río en Burlada ya había crecido casi dos metros esa noche, pero no fue hasta las 13 cuando alcanzó su máxima altura (5,71 metros). En Pamplona, a las 7 de la mañana, el río, por su mayor anchura, solo había crecido un metro de 00.00 a 7, pero subió casi dos más –hasta 3,91 metros- de 7 a 15.50. Que la riada –que a Villava y Huarte les pilló los primeros- ya era inevitable es obvio, pero que en un mundo en el que basta mandar un sms o hasta un guasap o que un tipo mire una pantallica llena de números que suben para que retiren todo a la carrera es indignante que los principales mandos de la Municipal de Pamplona sigan en su puesto. Y los de Emergencias, para qué hablar. Conozco a un  tipo que cuando juegas con él al mus, en lugar de echar órdago grita ¡Al Argaaaa!


12 junio 2013

Pon otra

¡Los dedos de las maaaaanos, los dedos de los pieeeeeees, lalílalílalelo... ya suman 23! ¡Oéoé-oeoe! Esa mínimo que se me hubiese salido del torax si por ventura rodríguez me hubiese encontrado el otro sábado de gafas presente en el congreso de las Juventudes de UPN que clausuró Barcina al grito de “Navarra vive una crisis judicial porque nos han llevado a los juzgados personas de la izquierda abertzale y de UPD, que no creen en los fueros”. La del 23 se la canto como poco. Y si voy con los colegas y estamos de sí –que estamos- le soltamos de corrido y sin respirar unas 45 arengas similares que nos sabemos que no casan una con otra pero qué importancia tiene eso. ¿Crisis judicial? Niecht, niecht. Crisis la vuestra, que sois los que o estáis imputados o a un paso. ¿Navarra vive una crisis? Niecht, niecht. Navarra vivía muy tranquila entre mil comillas hasta que a muchos se os ha ido cayendo la careta después de años y años de hacer lo que os petaba. Ahora vive indignada y con ganas de que lo que nunca debisteis ni hacer ni coger os suponga lo que nos supondría a los demás alegres mortales. ¿La crisis es porque los que os han llevado no creen en los fueros? ¿Si creyeran en los fueros, no habría crisis judicial en Navarra, estaríamos de fiesta mayor todo el día? De verdad, esta mujer en cuanto se sale del guión y de ha elegido usted gasolina sin plomo –recordemos su comparativa con el alicatador- y tiene delante a unos cuantos a los que para soltarles semejante milonga zopenca seguro que los considerará inhábiles para pensar solos o los ve ya con un porcentaje destacable de sangre en pacharán alcanza registros pasmosos. Lo gracioso es que alguno se lo creería. Qué digo alguno, ¡muchos! Claro, depende del tipo de dieta que lleves. Ir solo a pacharán deja unas cabezas...


09 junio 2013

Comida tranquila

Como todos los años en junio, ayer nos juntamos a comer unos cuantos amigos. 10. Esta vez fue fácil organizarse, gracias a las ventajas que ofrece Whatsapp, que para eso de unificar criterios es bestial. Al llegar a casa de los anfitriones, todos sin excepción y por pura educación y por las ganas –lógicas- que teníamos de saber de los demás tras tanto tiempo, dejamos los teléfonos móviles encima de la mesa. No abrimos la boca en seis horas. Uno de ellos iba tan ciego de chupitos de finas hierbas que tecleaba con el naso. Yo, que era el encargado de reponerles a todos la priva, me impacientaba, porque el tío no daba una: en lugar de mandarme a mí el pedido por whats, se lo mandaba a su mujer, que hacía como que no leía, el otro entonces me mandaba uno que a ver qué pasaba, yo le contestaba que yo las ganas se las notaba pero que me ciño a lo que leo, le preguntaba a su mujer, la otra se escudaba y así toda la tarde. Hubo un chupito que tardó en llegarle 45 minutos. Estábamos codo con codo. Sobre todo él. Me lo pedía, pero no que se lo pasara. Y giraba en sentido contrario. Se le calentaban. Por supuesto, cada uno nos trajimos nuestros cargadores y una alargadera que pusimos en mitad de la mesa. Javier –de eso no tuvimos ninguna duda. Lo comentamos entre nosotros, incluso. Y formamos un grupo de 8 en cuanto lo notamos. Ya no distinguíamos cuál era mensaje de grupo de cuál no. El borracho bastante tenía con no teclear la pantalla de la tele- le tiró los tejos sin protocolos a Yolanda, que ya era hora, después de más de 30 años de casaos. Luego cayó un rayo, se fue la luz, pasaron cosas terribles pero esperables, alguien gritó y pagó la comida. Salimos como pudimos de allá, tropezando entre emoticonos, y el año que viene más pero solo con la mano izquierda y qué bien.


08 junio 2013

Sharpe

Una de las situaciones más ridículas de la vida –que mira que hay- es oír a un escritor explicar su obra. Cuanto más profunda, épica, transformadora, pretenciosa y elevada sea, más ridículo resulta, aunque los y las haya adorables, lo mismo que en el gremio de fontaneros, notarios o enfermeras, solo que estos no escriben –públicamente-. Prefiero a los que no saben explicarla o ni lo intentan, como también es mejor hacerse el tonto y el bueno, el que se entera de lo que ocurre pero decide hacer como que no y seguir el juego del absurdo. Como Tom Sharpe, un genio literario de primer nivel: si en algo valoro el dinero es porque me permite estar despistado todo el día. Las personas que me hacen reír para mi son genios. Muy por encima de los que me hacen pensar y sentir o al menos lo hacen con demasiada estrategia. Quizá solo estén a su altura aquellas que me hacen hacer. Esas son insustituibles. Pero las personas que nos hacen reír no tienen valor: valen demasiado. Sharpe era una de ellas, por supuesto injustamente minusvalorado, etiquetado –“autor humorístico”- en comparación con los elevados que van de charla en charla y premio en premio y entrevista en entrevista y se pegan el moco hablando de la nada o aquellos que tienen teorías para todo y se convierten en iconos en cualquier campo. Es mucho más complejo hacer reír escribiendo que hacer llorar. Eso lo sabe cualquiera que alguna vez lo haya intentado, ambas cosas. Pero, a saber por qué razón, los que basan su estilo en ese don que no se entrena ni aprende ni enseña -yo no entiendo el humor- no tienen la admiración oficial de aquellos que no tocan ese campo, entre los cuales por supuesto hay muchos fantásticos. Tom Sharpe fue encarcelado y luego deportado de Sudáfrica por pelear contra el apartheid. Un tío serio.


07 junio 2013

Coconut Tree

Cuando leí que Barcina en el acto de entrega del premio de Viana –barazo, el Viana, sobre todo la zona heavy- al que asistieron los herederos –que a la tarde visitaron una empresa. Siempre he tenido esta duda: ¿esto va al mejor postor o cómo funciona?- dijo que “a la política hay que devolverle la dignidad” pensé lo mismo que cuando Tom Waits anunció que dejaba el alcohol: ¡vas tarde! Supongo que ya saben la historia esa que cuenta Keith Richards, por la cual él y Waits se juntaron una vez de farra, adrede, en plan duelo, y se les fue un poco de las manos, lo clásico de venga, va, la penúltima y pa casa. Richards lo recordaba así: no había manera, pero al final cayó. Me duró 7 días. Por todos es sabido que Richards no es de este planeta y no descansa ni al séptimo día. Él duró 8. Barcina parece ser que quiere emularle y hacer caso omiso a absolutamente todas las recomendaciones, la lógica, la historia, la ética, la situación de su partido, de la tierra del gobierno que dirige en minoría, la de su salud, la de la nuestra, a todo, está embebida en sí misma: ¡quiere ser Keith Richards, que sigue dándole al frasco a plomo! No hace falta recordar la lista infinita de situaciones rocambolescas protagonizadas por Richards –incendios, detenciones, cárcel, peleas, fracturas, cancelaciones, salir mamao raso a tocar con Dylan para cerrar el Live Aid y hasta el más allá-, como tampoco enumerar la notable agenda de actuaciones nada edificantes –UPNA, inversiones en Can, dietas Can- de la que quiere devolver eso a lo suyo, de lo que lleva viviendo 17 años. Neil Young, que tampoco se quedaba corto, cantaba que aquello que te ayuda a vivir, te acabará matando. nos. Va tarde, va tarde. No intente emular a Richards. Han caído millones. Él solo se cae del cocotero. ¡Y es suyo!
 

06 junio 2013

El Sadar

Que el gobierno lamenta que Osasuna haya decidido llamar nuevamente Sadar a El Sadar después de que estos años se llamara oficialmente Reyno de Navarra –aunque la oficialidad está en la memoria de los aficionados, que le llamarán siempre Sadar- en virtud de un acuerdo de patrocinio que el gobierno llevaba año y medio incumpliendo. Pues dijo Sánchez de Muniáin que lo lamentaba, el gobierno. Coño, supongo que más lamentará Osasuna que no se le haya pagado la parte que ustedes y ellos acordaron, de la misma manera que acordaron hace ya meses unos plazos para que Osasuna pague –como debe, como debe todo el mundo y no se monta tanto pollo, aunque sean lamentables y deleznables las deudas del deporte con las haciendas- su hosca con Hacienda. ¿No se les llena siempre la boca a la oficialidad navarra con eso de que somos una tierra de palabra y así? Pues entonces no hay nada que lamentar, porque quien la ha incumplido –en esa parte del interés mutuo- es el gobierno, un gobierno que aprovechó el viaje para decir que otros clubes navarros sí que llevan el nombre en alguna parte sin recibir contraprestación. Hombre, yo veo por la calle gente que lleva el pin con el mapa en la solapa. La gente es así: rara. Lo que, ya que no tiene dinero y aunque solo fuera para ayudar a que Osasuna crezca y así pague antes y así genere más para Hacienda –porque genera millones al año, ya que sus jugadores cotizan el máximo de IRPF, no como, por ejemplo, en Vizcaya, que les perdona mucho. Y en otras comunidades- es pelear a nivel político e institucional para que todos jueguen en las mismas condiciones, que seguro que si una empresa potente de aquí se fuera a largar porque 60 kilómetros para la izquierda se saltan las leyes montaba la de Dios. Menos lamentar y más pelear.


05 junio 2013

El vacío

¿A ustedes les han sustituido alguna vez? De su puesto en el campo en un partido, de una relación sentimental, de una amistosa, de un trabajo. Hay personas a las que nunca les ha pasado. Están acostumbradas, tan acostumbradas, a tener a la gente danzando a su alrededor, que por mucho que quieran no son capaces de hacerse a la idea de lo que duele. Es normal, no se les pueden pedir milagros. Pero al menos que lo comprendan. O que no mientan cuando es obvio que hay un sustituto. O que lo asuman si les va a pasar a ellos o a ellas. Hay que ser fuerte para aceptar y llevar eso, pero no queda otra que respetar las decisiones ajenas si son mínimamente fundamentadas. Todo hace indicar que Barcina no va a estar dispuesta a asumir con la diligencia que se le presupone al principal cargo público de Navarra el hecho de que toda una jueza le imputase si no fuera por su condición de no imputable al ser parlamentaria. Tampoco estaba dispuesta a ceder su puesto tal y como le requería el PSN para que se estableciese un nuevo pacto que –según ellos- restableciese la famosísima “estabilidad. En su vida personal ni idea, porque como todas es sagrada, pero en su vida laboral ha ido de victoria en victoria desde hace años y años. Le sucede a alguna gente. Cuando se aproxima su primera derrota, cuando la huelen, con más ahínco se aferran a todo. Quizá no sea solo ego. Tal vez haya una parte de miedo a desconocer la sensación de verse en la calle o de verse solo o de verse abandonado por algo o alguien al que creíste darle lo mejor. Puede que sea también inexperiencia en esas lides. Deberían enseñarlo esto en la escuela. Simulacros cabrones, pero efectivos. La hostia es monumental y siempre duele como nueva, pero si es honesta y limpia, se aprende. Esta al menos lo es. La hostia.

02 junio 2013

Ni loco

Trataré de ser lo más sincero posible y lamento el lenguaje, pero las palabras –todas- tienen su función y si las usamos es porque creemos que sus variantes o sinónimos no alcanzan a expresar lo que alcanzan las que utilizamos o al menos no tan rápida y claramente: estoy hasta los cojones. Sé que esto a muchos y muchas les echa para atrás y lo entiendo y lo apruebo. También que tiene un tufo machista o lo que leches sea eso y lo comprendo. Pero es la realidad. Estoy hasta los cojones de que cada mayo, cada abril, a veces cada junio, los medios de comunicación nacionales y también locales acojan en sus portadas, en sus pantallas iniciales web, en sus programas de televisión, en sus informativos, asuntos relativos al Himalaya solo si ha tenido lugar o una muerte o una situación extraña –la lamentable actuación de algunos líderes sherpas frente a Moro y Steck, en el Everest- y nunca jamás con anterioridad informen acerca de qué van a hacer o dejar de hacer los diferentes escaladores y escaladoras a los que luego destinan páginas, minutos e imágenes. Muy hasta los cojones. Por cuestiones del azar, fui y soy amigo de un escalador fallecido. Le ayudaba como amigo –como él a mí- a la hora de tratar de hacer visibles sus expediciones, para que sus patrocinadores –especialmente Lorpen, que vende a nivel nacional e internacional- se viesen reflejados en sus notables actividades. Era como darse contra un muro. Nos reíamos, pero, como periodista, a mi sí me molestaba. Siempre que sucede algo terrible, recibo no una sino varias llamadas muy amables para ver si entro en antena o cosas así. Las agradezco y las rechazo todas. No voy a ensuciar los nombres de Alexei Bolotov, Juanjo Garra o Kheshap Sherpa ante medios que ni sabían quiénes son. Ni el de Iñaki Ochoa de Olza. Ninguno.



01 junio 2013

Hoy por ti

¡Junio! Hola, majete. Pórtate bien. Muy bien con algunos que lo merecen de sobra, ciertamente. Quedas avisado. Chau. Hola a los demás. A lo nuestro. ¿Qué les pareció eso de que Miguel Sanz le aseguró a Enrique Goñi más o menos un salario de un millón al año durante cinco años? A mi, bien. No tengo nada en contra de que la gente gane mucho dinero. Y cuanto más cercanos a mi y más los quiera, más me alegro. Lo que me escama –con perdón- es lo siguiente: si tú ganas ese pastarro año a año –porque, como decía en el contrato o acuerdo, es lo que se estila en el sector financiero en esos pisos de “los rascainfiernos” (Gloria Fuertes)-, ¿para qué necesitas en paralelo pedir créditos o préstamos como al parecer solicitó él? Ojo, que yo en los números de cada uno no entro, pero, ¡¡¡ola!!! Que te quedas a camisas de cuadros, oye, leyendo lo que ganaban algunos en Can, como aquel que fuera comisario de la primera edición de Agora Talentia, que ahora perpetra su tercera edición, Enrique de Mulder, al que Goñi fichó para Vialogos y cuyo sueldo rondaba los 600.000 euros anuales. ¡Eso es talento, eso! Y es entonces, aunque tampoco hace falta ser muy talentoso y espabilado ni nada, apenas tirar de sentido común, para comprender que si Sanz y Barcina y cía tenían el poder de poner y quitar a estas cabezas visibles y si las cabezas visibles ganan más que el 99% de la población, a ellos reunirse un ratillo y llevarse algo de viruta les parezca normal y bien y un peluco de 3.000 euros les haga la misma ilusión que si me saco yo uno en el tirapichón. ¡Se mueven en esos fangos! Y el Banco de España haciendo la estatua, claro. Bastante tiene con pedir que trabajemos por menos del Salario Mínimo. Venga, basta. A trabajar, a hacernos personas de provecho. Y chitón. Somos gilipollas.